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Pavlov y sus experimentos con el mejor amigo del humano

Lic. Shadia Cure


Imagínate que vas caminando por la calle, te cruzas con alguien que tiene el mismo perfume que la persona que te gusta, y eso te pone igual de nerviose que cuando se lo sientes a esa persona especial.

¿Sabes por qué tuviste una respuesta fisiológica similar a la que tienes cuando estás cerca de la persona que te gusta? Bueno, si no lo sabes te invito a leer esta nota, y si lo sabes también quédate a leerla.


Quién diga que la ciencia es inflexible miente o no sabe de Iván P. Pávlov: Gran señor que en un principio estudiaba acerca del proceso digestivo de los perros, y quien realizó importantes avances mediante el desarrollo de técnicas digestivas que permitía que los perros sobrevivan mucho más tiempo con tubos artificiales que eran destinados a juntar jugos gástricos (Domjan, 2007).

Si bien ganó un premio nobel de medicina por su gran trabajo sobre la fisiología de la digestión, seguramente es más conocido entre les psicólogues por su labor sobre lo que se conoce como “aprendizaje asociativo”, más específicamente lo que llamamos “condicionamiento clásico” o los “reflejos condicionados”. ¿Lo mejor? Este descubrimiento se dio sin buscarlo; cosas que pasan en un laboratorio.


Para entender qué es el condicionamiento clásico, primero es importante tener claros los siguientes términos:

  1. Estímulo neutro (EN): es un estímulo que no produce respuesta en un primer momento (sonido de un metrónomo).

  2. Estímulo incondicionado (EI): es un estímulo que ya posee un carácter significativo y que produce una respuesta por sí mismo (la comida).

  3. Estímulo condicionado (EC): surge de emparejar EI con un EN, en donde luego de ciertos ensayos de emparejamiento entre ambos estímulos, el EN genera la misma reacción que el EI, pasando de ser un EN a un EC.

  4. Respuesta incondicionada (RI): es la respuesta que no necesita aprendizaje previo y que se produce en el organismo a partir del estímulo incondicionado (la segregación de saliva cuando se presenta la comida).

  5. Respuesta condicionada (RC): es la respuesta que se produce en el organismo a partir del estímulo condicionado (la salivación luego de escuchar el metrónomo).


Entonces, el experimento que llevó a cabo con el mejor amigo del humano (los perros, obvio) consistió en lo siguiente: se generaba sonido a través de un metrónomo y después se les presentaba comida. Este procedimiento se realizó con ayuda de un medidor de salivación que les eran colocados a los perros para poder medir las gotitas de saliva.

En un principio sólo después de la comida los perros salivaban, pero después ocurre lo que es maravilloso en todo este experimento: luego de una serie de presentaciones, quedan asociados tanto el EI y EN de manera contingente, es decir dándose una correlación entre ambos estímulos, en donde primero sonaba el metrónomo y luego se presentaba la comida. ¿Qué significa esto? Sencillo, cada vez que escuchaban el metrónomo, los perros empezaban a salivar sin ser necesaria la presencia de la comida.

Entonces, el condicionamiento clásico es un tipo de aprendizaje asociativo el cual consiste en que, luego de una relación de estímulos se logra modificar una conducta. A su vez, es una de las principales técnicas para investigar cómo se aprenden asociaciones (Domjan, 2007).

Si bien los experimentos empezaron siendo en animales, pronto se descubrió que los principios del condicionamiento clásico explican muchos aspectos del comportamiento humano cotidiano (Feldman, 1997). Las respuestas emocionales, por ejemplo, tienen alta probabilidad de aprenderse por procesos de condicionamiento clásico, como fue el caso del pequeño Albert, experimento llevado a cabo por Watson.

Este experimento consistió en presentar un ruido muy fuerte (EI), el cual le generaba a Albert una reacción de miedo (RI); el ruido fuerte se presentaba en conjunto con una rata (EN). Luego de varios ensayos se notó que Albert, quien no tenía miedo a las ratas en un principio, empezó a mostrar miedo al animal cuando la veía, aún sin la presencia del ruido. Así la rata se volvió un EC, que provocaba miedo como RC..

Y volviendo a nuestra pregunta del principio, este experimento nos demuestra que un estímulo neutro, es decir, algo que no nos genera nada en un principio (un perfume “x”) puede ponernos nervioses si lo llegamos a sentir luego de que nos dimos cuenta de que la persona que nos gusta (y nos pone nervioses, claro) ¡usa ese mismo!




Referencias:

Ardila, R. (1971). Los pioneros de la psicología. Buenos Aires: Paidós.

Domjan, M. (2007): El condicionamiento clásico: fundamentos. Principios de aprendizaje y conducta. Madrid: Debate.

Feldman R. (1997): Aprendizaje. En: Psicología. México: McGraw Hill Interamericana.

Fernández Teijeiro, J. (2006). La pasión por el Cerebro. Nivola, libros y ediciones.

Pavlov, I. P. (1993). Reflejos condicionados e inhibiciones. Planeta-Agostini, Barcelona.



 

Shadia Cure

Lic. en Psicología

Hago más chistes de los que la gente soporta.

Bokita y conductismo


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